miércoles, 28 de octubre de 2009

La Maquinista Terrestre y Marítima de la Barceloneta.



Hasta mediados de siglo XIX, las actividades de los habitantes de la Barceloneta se relacionaban esencialmente con el mar: la pesca, las actividades portuarias, la construcción de barcos de vela y la fabricación y venta de los aparejadores. En el año 1846, el Ayuntamiento de Barcelona prohibió la instalación de nuevas industrias con máquinas de vapor dentro del recinto amurallado. Muchas de las que ya había y de las de nueva creación se edificaron en las poblaciones más próximas, fuera de las murallas: Sants, Poblenou y la Barceloneta. Fue entonces cuando la industrialización empezó a penetrar en el barrio. La proximidad al puerto, que facilitaba la carga de la maquinaria pesada y la descarga de las materias primas, el espacio edificable, y desde 1848, la estación del ferrocarril de Mataró bajo el Portal de Mar, eran elementos que los industriales tenían en cuenta.
En 1841 la Barceloneta era ya la segunda población metalúrgica de Cataluña después de Barcelona, con las fundidoras y, sobre todo, los talleres Nueva Vulcano (1836).
Con la instalación del primer gasómetro (1840), que había obtenido la concesión del alumbrado de la ciudad, nacía la segunda especialización industrial en la Barceloneta: la producción de gas. Durante la segunda mitad del siglo XIX, el asentamiento de importantes industrias del metal (los talleres Alexandre, en el año 1845; la Maquinista Terrestre y Marítima, en el año 1855) fueron confirmando el proceso iniciado. A finales del siglo XIX las especializaciones de la industria de la Barceloneta habían quedado muy definidas: la metalurgia, el gas y las construcciones navales.
Sus primeros talleres se construyen en el barrio barcelonés de "la Barceloneta", en 1861, con una superficie total de 17.500 m². Contanban con 1.200 trabajadores. En 1917 construye su segunda fábrica, entre los barrios barceloneses de "Sant Andreu de Palomar" y "Buen Pastor", con una extensión de más de 100.000 m2, alcanzando una plantilla de 3.000 trabajadores.
Hacia 1965, los talleres de "la Barceloneta" fueron desmantelados, manteniéndose como almacén de productos, que, aunque finalizados, no fueron vendidos hasta más adelante. Hacia 1993, los talleres de "Sant Andreu" fueron desmantelados por completo, trasladándose a unos talleres construidos entre los municipios de Santa Perpetua de la Mogoda y Mollet del Vallés.
FUENTES: http://www.bcn.cat/ y "Sant Martí de Provençals, pulmó industrial de Barcelona (1847-1992)", de Jordi Nadal y Xavier Tafunell. ISBN: 84-7809-392-3
FOTOS: Chimevapor
DIBUJO: Castelucho, publicado en en el libro de A. del Castillo: "La Maquinista, personaje histórico", Barcelona, 1955.

viernes, 23 de octubre de 2009

La riada de 1962, El gran "Puente Textil" Barcelona-Londres-Béjar-Leeds-Barcelona.

En otoño de 1962 un desastre natural tendrá un impacto decisivo para la historia la comarca del Vallès (afectando gravemente a los municipios de Rubí, Terrassa, Sant Quirze del Vallès y Sabadell). El caudal de los ríos mediterráneos aunque escaso, en especial en el caso del Ripoll, se acrecienta brusca y violentamente produciendo riadas catastróficas. La riada del 25 de septiembre significó un volumen a su paso por Sabadell de más de 1.000 m3 por segundo, que duró unos 20 minutos de máxima intensidad, lo que resultó una abrupta crecida del nivel de río, cuya altura superó los cuatro metros (4,2 m.). “Y lo peor de esta riada fue que la inmensa masa de agua al arrasar la cuenca, arrancó árboles, piedras y otros objetos que actuando a modo de proyectiles causaron la atroz destrucción”

Cuando las trágicas inundaciones, en Cataluña se dijo y proclamó que se había montado un puente aéreo especial y específico entre Barcelona y Londres al objeto de llevar hasta el Reino Unido los tejidos catalanes para recibir allí el apresto final, ya que las inundaciones habían dejado inservibles las fábricas de apresto catalanas. La verdad es que se desplazaron a Londres contadísimos aviones en un principio y que, luego, toda la producción catalana recibió su apresto y acabado en Béjar. El puente aéreo se convirtió en una inacabable caravana,de camiones que hacían ininterrumpidamente el camino Cataluña-Béjar-Cataluña.
El desastre tuvo un gran impacto dentro y fuera de España y la solidaridad popular fue ejemplar. También la respuesta de las autoridades fue, en esta ocasión, rápida. La zona obtuvo la declaración de zona catastrófica (lo que permitía cobrar las indemnizaciones correspondientes a las empresas aseguradas), y el gobierno aportó un elevado crédito, además de otras prerrogativas fiscales, a fin de aliviar los daños producidos por la riada en toda la zona del Vallès. Esta actuación, conjuntamente con la puesta en marcha los planes de reestructuración de la industria textil lanera, subsanó los efectos más inmediatos y supuso una gran oportunidad para la modernización de las instalaciones industriales ubicadas en la zona fluvial afectada, que se encontraban en avanzado estado de obsolescencia. A su vez, otros problemas más apremiantes como la necesidad de proceder al apresto, acabado y tinte de la producción textil, que se encontraba en avanzado estado de fabricación, se solucionó con la apertura de un puente aéreo con Leeds (Inglaterra) durante algunos meses y la decisiva colaboración, cómo ya hemos dicho, de Béjar. Enlace de hemeroteca sobre la tragedia: http://hemeroteca.lavanguardia.es/preview/1962/09/29/pagina-9/32719914/pdf.html

sábado, 17 de octubre de 2009

El tren eléctrico de la "Mina Grott"





La Mina Grott es un túnel de casi un kilómetro y medio que conecta el pantano de Vallvidrera con la zona del Peu del Funicular. Su construcción se llevó a cabo en 1855 para llevar el agua hasta Sarrià, pero entre 1908 y 1916 acogió un vagón eléctrico llamado Tren de la Mina Grott, Con capacidad para 36 pasajeros y que iba sobre una vía de 0,60 metros. Actualmente pasan dos tuberías que llevan el agua en sentido inverso, de Barcelona a Sant Cugat del Vallès. Junto con el ferrocarril fue abierto al público un parque de atracciones denominado "Lake Valley" y pronto se notó la afluencia de público, lo que molestó a la dirección del Funicular de Vallvidrera, gestionado por el Ferrocarril de Sarrià. No se tardó en ponerle trabas (el "Mina-Grott" tuvo un éxito enorme y en un mes llegó a transportar 32.000 personas) recurriendo a la Guardia Civil, y el ferrocarril se cerró entre el 22 de julio y el 9 de agosto de ese año. A partir de esta fecha estuvo abierto al público junto con el parque de atracciones hasta 1916, año en que el Ferrocarril de Sarrià llegó a Les Planes. El principal problema con que se encontraba la explotación del "Mina-Grott" y del parque "Lake Valley" era que no se podía pedir concesión ya que los terrenos fueron concedidos a perpetuidad y el pequeño ferrocarril no se ajustaba a la Ley de Ferrocarriles entonces vigente, con lo cual fue considerado como una atracción más, por falta de los permisos necesarios.


FOTOS: Chimevapor, Arxiu dels Ferrocarrils de la Generalitat, Arxiu del Districte de Sarriá-Sant Gervasi.





lunes, 12 de octubre de 2009

Los trenes de vapor del Parc del Castell de l'Oreneta


El del parque del Castell de l'Oreneta es uno de los mejores ferrocarriles reducidos a escala y tripulados de Europa. Es un elemento destacado del paisaje barcelonés y de la oferta lúdica y cultural de la ciudad.
Se inauguró en el año 1981 y, a lo largo de un recorrido de 636 m y con tres anchos de vía de entre 5 y 10 pulgadas, el tren atraviesa tres túneles, dos puentes y un viaducto metálico. También dispone de una estación y un apeadero. En total, hay 11 locomotoras, entre eléctricas, de vapor y diésel, y unos doce vagones. Los domingos, los visitantes del parque pueden viajar con este tren de 11.00 a 14.00 horas.
Todo es posible gracias a los socios del Centro de Estudios-Modelismo Vapor Barcelona y Sabadell. El tren lo constituyó en 1980 un grupo de aficionados a los trenes tripulados y movidos por la fuerza del vapor. El material, casi siempre construido por los socios de esta entidad, reproduce fielmente todos los mecanismos propios del ferrocarril. Desde 1984, una vez al año tiene lugar la fiesta de las Veinticuatro Horas de Vapor, un programa que desarrollan muchas asociaciones de circuitos de tren de este tipo en Europa y América.

Fotos: Chimevapor

sábado, 3 de octubre de 2009

El Parc de la "Pegaso"








El Parc de la Pegaso es un buen ejemplo de aprovechamiento de terreno anteriormente fabril en desuso en beneficio del ciudadano.
El ajardinamiento del parque de la Pegaso es una buena combinación de especies autóctonas con otras que, pese a no pertenecer a nuestras latitudes, han entrado a formar parte de la jardinería de Barcelona.
En el pavimento de una pequeña plaza circular situada en un extremo elevado del parque se ha reproducido Pegaso, el caballo alado que fue durante muchos años el emblema de ENASA, (anteriormente Hispano-Suiza). De la antigua factoría de camiones se conserva la puerta de entrada que ahora es el acceso principal de este espacio verde, así como el edificio de oficinas, que ha sido destinado a equipamientos del barrio. Un recuerdo de la arquitectura industrial de mediados del siglo XX.
Este espacio verde está situado en los terrenos antiguamente ocupados por la emblemática fábrica de camiones de ENASA (Empresa Nacional de Autocamiones, Sociedad Anónima), entre los antiguos núcleos históricos de Sant Andreu y la Sagrera. El nombre del parque se debe a los populares camiones Pegaso que se producían en esta fábrica. Como ocurre en estos casos, se observan viviendas obreras junto al recinto.